La mamá del fallecido cantante Omar Geles, a sus 89 años, vende pasteles y da lecciones de vida

En las calles cálidas de Valledupar, entre acordes de acordeón y recuerdos imborrables, camina una mujer con alma gigante y una cava al hombro: Hilda Suárez, madre del inolvidable Omar Geles. Tiene 89 años y, contra todo pronóstico, decidió no quedarse en casa. En lugar de eso, recorre su ciudad vendiendo los tradicionales Pasteles Doña Hilda, el emprendimiento que lleva su nombre y su historia.

Lo más conmovedor es que no lo hace por necesidad. Su hijo le dejó todo para que viviera tranquila, sin preocupaciones. Pero Hilda, quien fue la fuente de inspiración de la canción “Los caminos de la vida”, sabe que hay cosas que el dinero no compra: la dignidad del trabajo, la alegría del contacto humano, el orgullo de seguir siendo útil. Por eso, cada pastel que ofrece no solo lleva sazón, sino fuerza, memoria y amor de madre.

Esta mujer que crió a sus hijos con las manos firmes y el corazón invencible, que hizo bollos, cocinó con leña y le cantó a la vida mientras luchaba por sacarlos adelante, hoy se ha convertido en un ejemplo vivo para cientos de emprendedores. Hilda Suárez no se detiene, porque su espíritu está hecho de lucha, ternura y resiliencia.

"Trabajo para sentirme viva", dice con sencillez. Y esas palabras retumban como un mensaje poderoso en tiempos donde muchos pierden la esperanza. Hilda no solo vende pasteles: entrega inspiración en cada esquina. Es el mejor homenaje que puede hacerle a su hijo… y un regalo que nos deja a todos. Porque mientras ella camine, los caminos de la vida seguirán teniendo sabor a madre.